RETRATO

Cuando era pequeño con mi madre iba al parque,

y allí con mis amigos pasaba la tarde,

así pasaban las horas y todo iba bien

pero el tiempo pasa y no volverá otra vez.

 

Cuando me hice mayor a mi vida llegó el amor,

no centrado hacia una pareja, sino a otro sector,

el sector de mi corazón, mi familia, mi honor.

 

Seguí creciendo y llegó el momento de elegir,

elegir a un representante de mi país,

tuve dudas y no sabía que decidir,

y solo quería a alguien que no fuese a mentir.

 

El arte me hizo entender mejor este mundo,

la poesía me mostró el poder de lo oculto,

la música, me enseñó que todo es eterno.

 

La religión nos da algo en lo que creer,

nos hace pensar en que hay que envejecer,

y llegada la hora vamos a fallecer,

pero la fe dice que algo después tiene que haber.

Cuando llegue el momento tendré que trabajar,

y la profesión es algo difícil de pensar,

pero elegiré una para mis conocimientos enseñar.

 

Al final de la vida la muerte está presente,

pero hay que afrontarla sin miedo y olvidarla,

pues hay que disfrutar la vida mientras dure,

mas cuando llegue el momento todo se acabará.

 

 Anónimo