El alcalde de Zalamea.

EL ALCALDE DE ZALAMEA

Calderón de la Barca

El alcalde de Zalamea es una obra dramática de Calderón de la Barca (1600–1681), escrita  en 1636. Es una de las obras más conocidas y representadas del Siglo de Oro de la literatura española. Se encuadra dentro de la literatura barroca y se clasifica como un drama de honor. Trata de contraponer, al reflejo de las preocupaciones de la Edad Moderna, el individuo al poder político. También se enfrenta el honor estamental a la virtud personal y por último, sociológicamente personifica el equilibrio de poder en el municipio moderno.

·        Argumento:

La obra narra el drama vivido en la localidad extremeña de Zalamea de la Serena al pasar las tropas españolas con motivo de la guerra de Portugal. El capitán Don Álvaro de Ataide, personaje de extracción nobiliaria es alojado en la casa del labrador rico de la localidad, Pedro Crespo, a cuya hermosa hija Isabel secuestra y ultraja. Cuando Pedro Crespo intenta remediar la situación, ofrece bienes a Don Álvaro para que se case con Isabel, a la que rechaza Don Álvaro por ser villana, es decir de clase inferior. Este desprecio afrenta definitivamente el honor de toda la familia de Pedro Crespo. En pleno trauma familiar, es elegido alcalde de Zalamea y siguiendo una querella cursada a la justicia por la ultrajada Isabel, aún sin poseer jurisdicción sobre el militar, Pedro Crespo prende, juzga y hace ajusticiar a Don Álvaro dándole garrote. La trama se resuelve, cuando el Rey Don Felipe II, revisa la decisión del alcalde, la ratifica y premia su decisión nombrando a Pedro Crespo alcalde perpetuo de Zalamea.

Ejemplo de una de las escenas de la obra:

JORNADA TERCERA (FINAL)

CUADRO IV

(Aparece dado garrote, en una silla, el CAPITÁN.)

REY.

Pues ¿cómo así os atrevisteis...?

CRESPO.

Vos habéis dicho que está

bien dada aquesta sentencia:

luego esto no está hecho mal.

REY.

¿El consejo no supiera

la sentencia ejecutar?

CRESPO.

Toda la justicia vuestra

es sólo un cuerpo no más;

si éste tiene muchas manos,

decid, ¿qué más se me da

matar con aquésta un hombre

que estotra había de matar?

Y ¿qué importa errar en lo menos

quien acertó lo de más?

REY.

Pues ya que aquesto sea así,

¿ por qué, como a capitán

y caballero, no hicisteis

degollarle?

CRESPO.

¿Eso dudáis?

Señor, como los hidalgos

viven tan bien por acá,

el verdugo que tenemos

no ha aprendido a degollar.

Y ésa es querella del muerto,

que toca a su autoridad,

y hasta que él mismo se queje,

no les toca a los demás.

REY.

Don Lope, aquesto ya es hecho.

Bien dada la muerte está     

que no importa errar lo menos

quien acertó lo de más.

Aquí no quede soldado

alguno, y haced marchar

con brevedad, que me importa       

llegar presto a Portugal.

Vos, por alcalde perpetuo

de aquesta villa os quedad.

CRESPO.

Sólo vos a la justicia

tanto supierais honrar.

En este fragmento de la obra aparecen el rey y don Pedro Crespo. Se trata de la escena en la que don Pedro ha mandado ejecutar a Álvaro Ataide ya que ha deshonrado a su hija y no quiere casarse con ella. El rey vio la sentencia que dictó don Pedro, y al creerla correcta, le nombró alcalde perpetuo de Zalamea.

El alcalde de Zalamea. Relieve en bronce, detalle del monumento a Calderón de Madrid (Juan Figueras y Vila, 1878)

·        Personajes:

- Pedro Crespo :  Es un labrador de los de siempre, que al final de la obra será nombrado alcalde de Zalamea. Su carácter es muy dinámico, con alto sentido del honor social. Opina que por ley natural hay quien tiene una sangre noble y hay quien no, pero también cree que ante la ley son todos iguales, y que se ha de hacer justicia siempre que se pueda. Tampoco cree que el honor y la clase se puedan comprar, como le insinúa una vez su hijo. Otros comportamientos que le caracterizan son su prudencia inicial y el tratar a las personas con el mismo respeto que le tratan a él. Pedro es en todo momento firme en sus decisiones y creencias, igual que da muestras de cariño a sus dos hijos.

-Don Lope de Figueroa: Se relaciona mucho con Pedro Crespo. Al principio expone sus ideas y sus creencias de que Pedro Crespo es un villano, y por tanto es inferior a él. También se deja claro que va a defender en todo momento a sus soldados y que Pedro Crespo va a defender su honor y el de toda su familia.

-Rebolledo y Chispa: Rebolledo y Chispa, sirven para llevar la voz de los soldados y sobre todo para hacer las tareas comprometidas y difíciles, en las que siempre se salen con la suya y nunca son castigados. Rebolledo representa el soldado gracioso que tiene el consentimiento del Capitán, mientras que Chispa sirve principalmente para cantar y para mostrar que una mujer también se puede espabilar dentro de un grupo de soldados.

-Nuño: Nuño que es el criado del hidalgo Don Mendo. Siempre le está recordando a su amo que ya no es rico y que nunca comen, con palabras o frases de doble sentido. Nuño es muy hábil y creo que su función principal es la de hacer reír de vez en cuando, sobretodo en situaciones tensas o aburridas, a la vez que mostrar la ridiculez de su amo y de los hidalgos en general.

-Isabel: El papel de Isabel, la protagonista femenina, es el de objeto bonito, porque raramente expresa su opinión, solamente lo hace cuando narra los hechos que le han sucedido y lo desgraciada que es.

Su papel, quizá, es el de mostrar que una villana muy bella, por muy villana que sea, puede tener a capitanes, hidalgos, etc. enamorados. Por lo tanto, demuestra que según en qué casos los prejuicios clasistas de la época se eliminaban.

- El rey, Fernando II: El rey tiene un papel muy próximo al de Dios ya que aparece en el momento oportuno para que se haga justicia. La figura del rey es muy autoritaria y perfecta, pues reconoce los méritos de Crespo y lo nombra alcalde perpetuo.

-Álvaro Ataide: Capitán de las tropas de Lope de Figueroa. Que rapta, viola y abandona en el campo a Isabel (hija del alcalde). Chulo y altanero se niega a casarse. Pedro Crespo manda ajusticiarle. Llega el rey Felipe II y aprueba el hecho.

·        Tema principal:

La defensa del honor, el alcalde que es un hombre honrado pierde el honor por la ofensa a su hija, primero intenta que el capitán se case con su hija, y al negarse lo juzgan y condenan.

·        Opinión  personal:

La lectura de esta obra se puede hacer un poco pesada debido a que fue escrita en el siglo XVII y por lo tanto, en un castellano diferente al de hoy en día, de modo que su lectura puede ser un poco difícil y complicada. Sin embargo, esta obra es una de las más famosas de la literatura española por lo que sería recomendable leerla, pero en mi opinión, esto debería ser cuando los lectores tengan un determinado nivel de cultura.

Yo como no he leído el libro, no tengo una opinión muy fundamentada, pero el argumento y la descripción de algunos personajes me han  parecido interesantes. Una de las cosas que me ha llamado la atención es el personaje de Álvaro Ataide, ya que, siendo un soldado español, cuando le ofrecen cobijo, en vez de agradecerlo, ultraja a la hija de quien se lo ha ofrecido. Sin embargo, esto no quiere decir que se merezca la muerte, que a mí me parece un poco exagerado, pero siendo como es una obra del siglo XVII, es cierto que había otros pensamientos. Otra de las cosas que me ha impactado ha sido por ejemplo el final, que el alcalde decide matar a un hombre por haberlo deshonrado y el mismo rey al enterarse de la noticia no solo no se lo discute, sino que lo apremia por ello convirtiéndole en alcalde perpetuo.

Es una obra que nos relata que lo más importante de aquella época era sin duda el honor, y hay una especie de moraleja en la que nos dice que debes luchar por ese honor (lo que hace el alcalde, intenta recuperar ese honor ejecutando al soldado). También nos remarca la importancia de la sociedad estamental, ya que el soldado podría haber salvado su vida habiéndose casado con la hija del alcalde, pero como es una simple villana (residente de una villa), piensa que no merece la pena hacerlo.

Por este tipo de actos y pensamientos, esta puede ser una obra que hoy en día impacte, ya que uno no se puede tomar la justicia por su mano ni decidir sobre la vida de los demás, pero al mismo tiempo, también nos muestra que hasta la gente de los pueblos se pueden defender de las injusticias.

Sara Moreno López 1ºCTC