lunes, 14 de junio de 2021

 RESUMEN DE LECTURA VOLUNTARIA



Dos pueblos de la India estaban en guerra y una pareja que acababa de tener un hijo. Para aumentar sus oportunidades de sobrevivir deciden abandonarlo en la jungla asiática.
Aquí moriría, de no ser que un lobo lo encontró en los frondoso matorrales de la selva, y lo llevo a la caverna de los lobos. Por otra parte, Sheer Kan, un feroz tigre quería vengarse de los hombres y al enterar de que un cachorro humano había aparecido empezó la búsqueda para darle caza pero los lobos le protegieron en todo momento. Cuando ya había crecido, criado entre lobos, fue enviado con Bagheera, la pantera negra para que le enseñara la ley de la selva y de los animales, ayudada de Balú, el oso, que le daría algún zarpazo para que se comportase y fuese disciplinado. Mientras le enseñaban la ley de los animales de la selva que consistía en no matar ganado, ni hombres (porque podrían tomar medidas que harían sufrir a los animales que viven el las frondosas selvas de Asia), vivían aventuras y Mowgli aprendía estrategias para hacer de la vida en la Jungla, algo más fácil, hasta el punto de dominar el fuego, conocido por las criaturas de la selva como ''flor roja'' a la vez que temido.
Las discusiones entre Sheer Kan y la piedra del consejo (la manada de lobos que tomó al niño como hijo) aumentaban debido al deseo de venganza del tigre contra los seres humanos.
Pero un día Mowgli estuvo presente en la piedra del consejo cuando Sheer Kan rondaba la zona, lo que llevo a una victoria parcial del niño ya que contaba con la ayuda del fuego, el cual aterraba al felino a la vez que a los lobos. Aprovechando esto último, también se hizo respetar entre la manada de canes.
En cierta ocasión Mowgli y Balú estaban en la jungla y el niño se percato de que estaban siendo observados. Cuando Balú se dió cuenta le contó sobre aquellos espectadores arbóreos. Según el oso, esos eran los animales más odiosos de la selva y nadie quería acercarse por miedo a ser acribillados a frutos secos o semillas. Estos animales molestos, también conocidos como los Bandar-log, son los monos.
Balú los ignoró y le dijo a Mowgli que no les hago el mínimo caso. Pero cuando Balú se durmió, los rastreros primates aprovecharon para secuestrar al chico. Cuando el gigante peludo vió al niño en brazos de los monos ya era muy tarde y ningún intento de rescate sería útil.
Los monos eran muy estúpidos y cortos, ya que si tenían alguna idea se les olvidaba y se peleaban confundidos impidiendo el avance a su sociedad. Los Bandar-log planearon esclavizar a Mowgli para que creara objetos por ellos.
Pero Balú no se iba a quedar de zarpas cruzadas y le pidió ayuda a Bagheera, y al terror de los monos: la boa Kaa.
estos atacarían a los monos en su campamento, un templo abandonado donde retenían a Mowgli.
Tuvieron que ser sigilosos para entrar pero una vez allí empezó la batalla campal contra los monos.
Tras una duradera guerra, lograron rescatar a Mowgli pero Bagheera salio gravemente herida aunque pudo recuperarse.
Al volver a la piedra del consejo los lobos le comentaron que Sheer Kan le andaba buscando y que debía cazarlo, o sería cazado él.
Mowgli entonces se retiró a la aldea donde sería acogido por una mujer y más tarde trabajaría el ganado.
Pero solo estaba con las vacas con un propósito: Usarlas contra Sheer Kan.
Un día notificaron a Mowgli de que el feroz tigre acababa de comer su presa.
Estando lleno sería muy torpe para escapar, entonces, Balú y Bagheera lo arrinconaron mientras que Mowgli dirigía las vacas hacia el felino que no tuvo oportunidad de defenderse y terminó siendo trofeo del audaz niño.
-Me ha parecido un libro muy duradero y entretenido con momentos tranquilos e intensos. Me ha gustado bastante.

LIAM, 2º ESO-A

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