RESUMEN DE LECTURA VOLUNTARIA
Invisible
Personajes:
Protagonista: Un adolescente, estudioso, empollón, obsesionado con los comics es el protagonista de esta historia. Vive con sus padres y su hermana pequeña, y está enamorado de su mejor amiga.
Zaro: Es el mejor amigo del protagonista, y se va alejando de él mediante transcurre la historia, al final lo único que los une es una cicatriz que tiene este en la ceja.
Kiri: Es la mejor amiga del protagonista, la cual también está enamorada de él y lleva mucho tiempo escribiendo una carta, que al final no llega a entregarle. En su primera aparición se la describe como la chica de las 100 pulseras.
Luna: Esta es la hermana pequeña de nuestro protagonista y tiene una gran importancia en la historia
MM: Es el abusón, el cual tiene una gran cicatriz en el pecho, justo encima del corazón y le falta medio dedo.
Profesora: Ella ha sufrido acoso en el instituto y es la única que se da cuenta de que al protagonista le pasa algo.
Dragón: es un tatuaje que tiene la profesora en la espalda, encima de todas las cicatrices que le recorren la espalda. En el libro las eluden con la metáfora “un universo en la espalda” como si estas marcas fueran estrellas. El dragón “despertará” cuando ocurra una injusticia.
Resumen:
Esta historia empieza realmente con un viernes normal y corriente con un examen de matemáticas a última hora, cuando el protagonista termina el examen, y MM, que está sentado detrás suya, le pide que le pase el examen para copiar. Este dice que no, y por ello, MM decide vengarse de él, ya que no está acostumbrado a que nadie le niegue nada.
El chico pasa el fin de semana aterrado por lo que le pueda pasar al volver a clase el lunes. Le llegaron varios mensajes de amenaza al móvil antes de que el chico lo apagara.
El lunes, nuestro protagonista llegó nervioso al instituto y al verlo, MM se sintió más poderoso, porque el miedo es lo que mueve a las personas como él. En el recreo, MM, le quitó al chico su bocadillo de atún, pero al percatarse de que era, lo tiró al suelo. Kiri salió en defensa del chico, pero no sirvió de mucho.
En ese momento, nuestro protagonista se volvió hulk. Esa fue la reacción de su cuerpo contra la rabia comprimida. Varios de sus compañeros lo grabaron, y a partir de ahí pasó a ser el chico tomate, Supertomate. Sus amigos cercanos empezaron a preguntarle por qué no se defendía cada vez que le quitaba MM el bocadillo.
Después de varias ocasiones en las que MM le había quitado el bocadillo, el chico se cansó, y decidió poner veneno de ratas en el bocadillo, aunque no se sentía demasiado bien hacerlo, ya que una acción así podía transformar al héroe en villano. Pero cuando llegó el momento definitivo, el chico empujó a MM, evitando que este mordiera el bocadillo de Nocilla.
A partir de ello, todo fue peor. Más empujones en el pasillo, más cosas que le lanzaban a las espalda, ataques más violentos después de todo. Después de clase, MM espera al chico en la salida, donde le tira todo lo de la mochila al suelo.
Al día siguiente tenía un examen para el que no había estudiado nada.
Y aquí empiezan las sospechas. Una profesora sentada en su escritorio ve el examen del chico cuando se da cuenta de que no hay casi nada respondido, y eso suponía que le había pasado algo. No podía ser nada, uno no pasa de sobresaliente, a suspender con rotundidad.
El dragón le susurra: “hazlo, ponle un diez, nadie lo notará” “pero, ¿y si lo hacen?”, piensa ella. “Atente a las consecuencias”. Así la profesora califica el examen.
Un nueve y medio, esa es la nota que le llega al chico, ¡Imposible!, piensa. Ese día el chico volvió a casa a solas con Kiri. Tuvieron tiempo de hablar, aunque ella tuvo que morderse la lengua, no quería incomodarlo con estúpidas preguntas. Se despidieron en el portal de su casa. Si Kiri hubiera corrido hacia él antes de entrar a casa, lo siguiente un hubiera pasado.
Después de irse Kiri, el chico tomate vio a MM y sus amigos buscándole. Corriendo, se escondió en los tubos de cemento de un descampado al que solía ir con Kiri y Zaro de pequeño. Notó un zumbido detrás suya, era un avispero. Ahora no podía salir, porque le verían. Sin embargo, una idea descabellada cruzó por su cabeza, si a Spiderman, le picó una araña; a él, le podía picar una avispa para conseguir sus superpoderes.
Las avispas empezaron a picarle, y el chico salió corriendo de su escondite llevado por el dolor. Entonces todos salieron corriendo, MM y sus amigos (no antes sin grabarlo con el teléfono). El chico avispa acabo en el hospital, porque a pesar de que al menos eran solo 4 picaduras, él era alérgico, y que unos picotazos más, y podía haber llegado a morir. Después de salir del hospital, el chico avispa estuvo unos días sin que le atacaran monstruos, pero su video rodeado de avispas se hacía viral y saltaba de móvil a móvil a gran velocidad: Youtube, Instagram, Facebook…
Este video también llega al móvil de Kiri, que al contrario de todos los demás, ella no ríe, ella llora de rabia, de impotencia, y sus cien pulseras tiemblan en su brazo.
A la vuelta a clases, no pasó nada. Siempre ocurría eso: cada vez que pasaba algo gordo, dejaban de atacarle por 3 o 4 días. MM se pregunta si le habrá contado algo a alguien, si lo sabe un profesor o si lo tuvo que decir en el hospital.
En nuevo ataque, MM tiró al chico avispa un sacapuntas a la espalda, y este contra atacó con boli, el cual le dio a Betty, la novia de MM.
Lo arreglaron en el baño. El chico avispa había salido corriendo al baño, y es allí donde descubrió el poder que le habían dado las avispas. Podía respirar bajo el agua. Le metieron la cabeza en el váter varias veces antes de para, en el agua mezclada con orina. MM y sus compañeros volvieron a clase sin él. Kiri fue a buscarlo al baño.
El chico trataba de secarse la camisa y la cabeza en el secador automático sin éxito. Allí se encontraron los dos, compartiendo una larga mirada de arrepentimiento y vergüenza.
Seguidamente, la profesora va a hablar con la directora sobre el asunto del chico avispa. Le explica lo que está pasando; que su rendimiento está bajando, etc. La directora lo niega, ya que “no puede hacer nada sin más pruebas”. El dragón se despierta, pero la profesora consigue controlarlo. Hará algo, eso lo tiene claro.
El chico va todos los días a su rincón secreto, a su batcueva. Allí espera a la hora exacta a la que pasa un tren y grita, grita con todas sus fuerzas, y se pregunta cuando llegara su ayuda: Los X-men son un equipo y se apoya, batman tiene a Robin.
Al día siguiente cuando empiezan a lanzarle cosas, la maestra de literatura s contra sobre si misma, y sus alumnos no dan crédito a lo que ven. El dragón siempre ha estado observando, las ha visto todas, todas las tizas, hasta el escupitajo. El dragón es el que actúa en ese caso, se levanta y coge a MM del cuello a dos manos, levantándolo del suelo y sacándolo de clase, cerrando la puerta con un golpe violento.
En el pasillo, la profesora discute con el dragón, preguntándole qué va a hacer con él. Se gritan el uno al otro y cuando lo suelta (a MM) este se queda temblando en la pared.
Durante las siguientes clases, la profesora escribe una palabra en la pizarra al empezar la clase, para analizarla. Elige palabras con significado como cobarde. Cobarde es la persona que no es valiente, pero cobarde también es la gente que se enfrenta al oponente más débil para quedar mejor, ese, también es un cobarde.
El chico avispa se había cansado de huir. Cuando le persiguieron al salir de clase se quedó sentado esperando en un banco su llegada, pero al llegar, mirar hacia todos los lados sin verle. Ahora era Invisible. Por la cabeza del chico invisible pasó la idea de que… ¿y si esa no era la primera vez que se hacía invisible? Eso explicaba porque nadie le había ayudado durante las otras veces.
Unos días después, la profesora se reunió en un parque con el chico invisible, y le dijo que lo sabía, que sabía lo que estaba pasando. Y todo porque ella había pasado lo mismo. A ella se le encogía el corazón al notar que el chico parecía encantado con ser invisible, ya que eso ensu experiencia, no había sido bueno.
A partir de ese día, la profesora trato de hacer entender a la clase que todos podemos ser igual de malos que el que provoca el mal, sin hacer nada, tan solo mirando o pasando de largo el problema, mediante unos cuentos.
MM empieza a sentirse mal, y decide hablar con el chico avispa. Este lo sorprende después de clase, no sabía que iba a hacer o decirle. Los dos chicos quedaron frente a frente. Muchos sentimientos se juntaron en el interior del chico invisible, haciendo que se meara en los pantalones. Y salió corriendo. MM se quedó paralizado, él no le había hecho nada en ese momento, y no lo entendía, ya había hecho tanto daño al chico avispa que no importaba si en ese momento no había hecho nada, ya había mucho roto.
Esa noche, al igual que las demás desde hace mese, dos hermanos; una pequeña y un hermano mayor, se echan en la cama cuando el hermano mayor le cuenta a su hermana un cuento basado totalmente en hechos reales. Porque mentiría si dijera que nadie sabía lo que le pasaba, Luna lo sabía.
Esa noche, su hermano le contó la historia del chico al que nadie quería. Luna afirmó que ella sí, que ella sí que lo quería. Claro, ella quiere a todo el mundo. Cuando ella se durmió se sentía tranquila y segura en los brazos de su hermano, sin embargo él no se sentía nada.
A la mañana siguiente él decide no ir a la escuela, acabar con todo. Cuando la profesora se da cuenta de que él no está, va a hablar con la profesora para llamar a los padres. Ellos afirma que el chico salió de casa. La profesora va a buscarlo.
Mientras tanto, el chico invisible se dirige a su lugar secreto, repasa los dibujos que allí tiene, la lista de personas que no le vieron cuando MM le estaba pegando o en cualquier otro momento, mirando los comics que tenía allí guardados, que ahora estaba mojándose por la lluvia. El tiempo iba pasando, se acercaba el momento.
La profesora sale corriendo con el coche tratando de llegar al escondite del chico lo más rápido posible, con el dragón quemándole en la espalda.
El chico se sube a las vías del tren, ve la luz del tren a lo lejos, alejarse. Si de verdad es invisible, el tren no lo verá. Suena la bocina. ¡No puede ser!, piensa el chico invisible, como le ha visto.
La profesora se retuerce en su asiento, sabe que no va a llegar. El dragón la saca del coche y corre bajo la lluvia a por el chico.
Diez segundos para impacto, la bocina sigue sonando, la cabeza del chico divaga, pensando que en cosas que puedan salvarlo. Piensa en Kiri, pero al final ella también dejó de verlo. De repente cae en la cuenta, quizá el tren le haya visto por la lluvia. Esa mentira era mucho mejor que la verdad, que aceptar que todas esas personas que le han visto sufrir, no han hecho nada por ayudarlo.
La profesora junto a dragón vuela hacia las vías de tren, en dirección al chico, no van a llegar, piensan.
Sin embargo, cuando solo quedan ocho segundos y el tren está a punto de llevarse a ese chico, él ve a Luna, extendiendo los brazos hacia él, ve a Luna, su pequeña Luna, sin pensarlo, él también extiende sus brazos y ahí es cuando la profesora lo agarra con todas sus fuerzas y tira de él hacia ella. El tren pasa de largo rozando al chico.
La profesora lo lleva a su lugar secreto, donde lo deja en el suelo y comprueba si respira (le hace el boca a boca). Ya ha llamado a la ambulancia, que no tardará en llegar. Se fija en todo lo que hay alrededor, sobre todo en la lista, y la lee con un nudo en la garganta.
“Es ahí, observando esa lista, cuando se pregunta ¿qué clase de sociedad hemos construido?¿cuándo nos volvimos monstruos?”
Opinión:
Adoro el libro, es uno de los mejores que he leído. Lo recomendaría a cualquier persona ya que una maravilla así, merece ser leída por cuanta más gente mejor. Es una historia preciosa que habla sobre el bullying desde una perspectiva más emocional y dolorosa, aparte de que es narrada por dos diferentes puntos (narrador y primera persona). Me encanta el capítulo de de la historia del niño al que nadie quería, nunca puedo aguantarme las lágrimas. Lo he leído tres veces y cada vez se lee de una manera distinta así que lo recomiendo al 100%.
MARÍA MALLOR, 2º ESO-B
No hay comentarios:
Publicar un comentario