Mi pequeña biblioteca

 Mi primer recuerdo es cuando mis papás me leían por las noches antes de dormir los cuentos de toda la vida. Cuando aprendí a leer releía estos cuentos como si fuese la primera vez que los descubría. Más tarde, sobre los seis años, guiada por el mundo de las brujas y la fantasía, comencé a leer la colección de “Kika superbruja“. Me fascinaban sus travesuras y sus trucos de magia. Al ir creciendo estas historias se me quedaban un poco cortas, por lo que comencé a interesarme por la colección de “Las princesas de la fantasía”, formadas por trece volúmenes que he terminado este año. No suelo leer demasiado durante época de colegio, pero me gusta mucho hacerlo en vacaciones. Esta colección trata de cinco princesas que son separadas al nacer. Me han gustado estas historias porque es un mundo de fantasía en el que me transporto y las vivo como si fuese una de sus protagonistas. Me hace sentir parte del libro, como una de las princesas, y todas sus aventuras me pasaran a mi. Leer me hace desconectar de la realidad, no solo eso, sino que también enriquece mi vocabulario. 

En resumen, para mí, la lectura es como una pequeña película en mi imaginación. 

NEREA MIGUEL MUÑOZ - 1º C